viernes, 25 de octubre de 2013

El viejo que leía novelas de amor de Luis Sepúlveda

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Descripción del libro
Antonio José Bolívar Proaño vive en El Idilio, un pueblo remoto en la región amazónica de los indios shuar (mal llamados jíbaros), y con ellos aprendió a conocer la Selva y sus leyes, a respetar a los animales y los indígenas que la pueblan, pero también a cazar el temible tigrillo como ningún blanco jamás pudo hacerlo. Un buen día decidió leer con pasión las novelas de amor -«del verdadero, del que hace sufrir»- que dos veces al año le lleva el dentista Rubicundo Loachamín para distraer las solitarias noches ecuatoriales de su incipiente vejez. En ellas intenta alejarse un poco de la fanfarrona estupidez de esos codiciosos forasteros que creen dominar la Selva porque van armados hasta los dientes pero que no saben cómo enfrentarse a una fiera enloquecida porque le han matado las crías. Descritas en un lenguaje cristalino, escueto y preciso, las aventuras y las emociones del viejo Bolívar Proaño difícilmente abandonarán nuestra memoria.

Mi opinión
Es un cuento maravilloso, de como un hombre pasa de ser un enamorado de su mujer a el mejor cazador de la zona, estando en contacto con las tribus próximas a su ciudad, en pleno amazonas. Su ciudad se ve amenazada por una Tigrilla a la que han arrebatado sus cachorros y no hay nadie capaz de acabar con ella, excepto el viejo cazador, enamorado del amor y al que le encantaba leer novelas de amor.
Un canto maravillo al amor, a la naturaleza, merece la pena leerlo.

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